miércoles, 2 de octubre de 2013

DIA 16.- SILLEDA - SANTIAGO DE COMPOSTELA. 40 Kms.

Desde que salimos de Murcia hace 16 días, no nos había caido ni una gota de agua, pero nada más salir de Silleda comenzó a chispear. Santiago es la segunda ciudad más lluviosa de Europa, así que no nos iba a pillar de susto llegar mojados a la Plaza del Obradoiro. 

Primeras pedaladas de nuestro último día. Como novedad, la lluvia.

Lamela

Fuimos todo el día por la N-525. Había tráfico pero también buenos arcenes

Última provincia, La Coruña. Pasamos por ocho provincias en 16 días.

Cabeza de carrera. Santi, Merce y Victor. Tan solo 17 kms para llegar a Santiago.

Llegada a Santiago

Pasamos por el lugar del accidente de tren en Angrois

Y por fin llegamos a la Plaza del Obradoiro

Foto de pelotón



Después de las fotos de rigor fuimos a hacer cola para recoger la compostela. Realmente nuestro viaje a Santiago no era por motivo religioso pero habrá que seguir la tradición.
Fuimos a comer y a visitar un poco la ciudad y por la tarde se presentó en nuestro hotel un trabajador de Prodigal, la empresa de transporte que iba a llevar nuestras bicis hasta Murcia. Nuestra experiencia con ellos ha sido fantástica. Por tan solo 35 euros por bicicleta, la recogen donde tu les digas, te la empaquetan junto a las alforjas y te la llevan a casa. Llegaron muy bien empaquetadas y en perfectas condiciones. Totalmente recomendable.

Después de una buena ducha salimos a comer


Por la tarde nos despedimos de los chicos de Reus con los que habíamos pasado unos días estupendos. Muchas gracias por acoger en vuestro pelotón a los "infiltrados".
Hasta la tarde del día siguiente no salía nuestro vuelo, así que nos dió tiempo a visitar un poco la ciudad, que nos gustó pero la verdad que tampoco nos apasionó.




Sepulcro de Santiago

Catedral de Santiago

Abrazo a Santi

Santi

Catedral

Plaza del Obradoiro

Plaza del Obradoiro

Y fin de la historia. Proximamente otro viajecico por España.




miércoles, 25 de septiembre de 2013

DIA 15.- ORENSE - SILLEDA 73 Kms.

Orense es una de las ciudades elegidas por muchos peregrinos a pie para iniciar el Camino Sanabrés,  la compostela se obtiene haciendo al menos 100 kms a pie, o 200 kms si los haces en bicicleta o a caballo. Ese era el principal motivo por el cual en el albergue de Orense esa noche había bastante gente, la mayoría comenzaban desde allí.
Al salir estuvimos hablando con un holandes que había venido desde su país en bicicleta y ya llevaba más de 2.000 kms recorridos, el doble que nosotros. Su bici era una Kona Miyata, especial para cicloturismo, con un precio cercano a los 2.000 euros. En el precio no nos duplicaba sino que casi cuadriplicaba el precio de nuestras dos bicis juntas.

Nuestras bicis junto a la del holandes en la puerta del albergue de Orense

Nos habían recomendado salir de Orense por la carretera nacional, ya que el camino en sus primeros kilómetros tenía unos desniveles casi imposibles e ibamos a tener que ir arrastrando nuestras bicicletas. Según nos decían, la N-525 no tenía casi tráfico y era la mejor opción.
Salir de la ciudad ya fue bastante estresante pero al poco de cruzar el Río Miño, comenzamos a subir y el tráfico cada vez era más peligroso. Ascendimos durante varios kilómetros que se nos hicieron interminables por el estrés del tráfico y la tensión de estar siempre mirando por el espejo retrovisor a ver a que distancia nos iba a pasar el siguiente camión. Tras ascender unos 8 kms vimos pasar a los chicos de Reus por un puente sobre nuestras cabezas. Enseguida abandonamos la nacional para alcanzarlos, ellos llevaban GPS y mapas de la ruta y pensamos que iban por la ruta buena, pero parece que al final nosotros habíamos elegido la mejor opción, ya que según nos comentaron, la salida de Orense por el camino fue muy agotadora, teniendo que subir andando y arrastrando las bicis.
Tomamos de nuevo la nacional que parece que poco a poco se iba descongestionando de vehículos, además fuimos cogiendo partes del camino hasta que optamos de nuevo por ir por la nacional.


Con nuestros tres amigos de Reus ya formabamos un nutrido pelotón



Lo que más le gustaba a Merce de este pelotón es que los avituallamientos se hacía más largos y eran más frecuentes que cuando pedaleábamos solos

En Silleda, el pelotón al completo, se alojó en el Hotel Ramos por 30 euros la habitación doble y 20 la individual, sin duda muy buena opción.
Después de descansar un poco fuimos a cenar al restaurante que había enfrente del hotel. Una de las mejores cenas de nuestra ruta y además con buena compañía.


Cenando en Silleda con Victor, Salva y Santi. 

La dueña del restaurante con Salva y Victor

domingo, 22 de septiembre de 2013

DIA 14.- LA GUDIÑA - ORENSE. 100 Kms.

Iniciamos la ruta al amanecer y al poco de salir de La Gudiña nos encontramos con los tres "chavales" de Reus. Compartimos con ellos varios kilómetros por una carretera casi siempre en ascenso, y sin apenas un árbol. Con la gran cantidad de incendios que hay todos los años en Galicia no nos extraña encontrarnos de vez en cuando con estos paisajes. En Campobecerros ellos hacen una parada y nosotros seguimos por un cuestón bastante importante. El encargado del albergue nos dijo la tarde anterior que solo subiríamos un poco al principio y luego era todo bajada hasta Laza, a este lo ponía yo a subir ese cuestón. De todas formas siempre cogemos con pinzas la información de la gente que no ha hecho el recorrido en bici, sobre todo en cuanto a los desniveles. 
 

Embalse de As Portas

Las obras faraónicas del AVE en Galicia


Embalse de As Portas


Pasando por Portocamba. Antes de llegar a Laza nos encontramos con varios pueblos anclados en el pasado.

Montañas antes de llegar a Laza


En la bajada ya iban apareciendo grandes pinadas

Por fin llegó la bajada hacia Laza, un pueblo de menos de 2.000 habitantes, pero que parece una gran ciudad al lado de las aldeas por las que hemos pasado a lo largo de la mañana. Nos comemos unos bocatas en un bar antes de comenzar a subir la gran dificultad de la jornada, el monte Requeixada. La subida nos la tomamos con tranquilidad y vamos ganando altura poco a poco. Es la típica montaña en la que cuando parece que ya has llegado arriba, tomas otra curva y ves que la carretera sigue culebreando durante algunos metros más, y asi una y otra vez. 
Casi al final de la subida llegamos a Alberguería. En este pueblo es famoso el "Rincón del Peregrino" un bar con cientos de vieras colgadas por los peregrinos que pasan por aquí. Nosotros también colgamos la nuestra. 

Bar y Albergue "Rincón del Peregrino" en Alberguería 


La música es del bar


Alberguería
Salimos de Alberguería buscando el camino, pero nos tuvimos que dar la vuelta y coger de nuevo la carretera, las ruedas se nos llenaron de pinchas pero por suerte no pinchamos.

Tras alguna confusión con las señales del camino llegamos a Xunqueira de Ambía. El calor era insoportable, el día anterior anunciaron ola de calor en Galicia y por desgracia no se equivocaron. Paramos en un bar, ya no nos apetecía beber agua, ni refrescos, así que nos hidratamos con unas cervezas bien frescas y unas tapas de embutido de la zona. El dueño del "Bar Luciano", que al principio era mas serio que una esparteña, luego cogió confianza y estuvo de charla con nosotros. Al vernos tan cansados y acalorados nos dijo que nos iba a hacer una "proposición indecente". Jodeeer, a ver por donde sale este tio!!  A 1 km del pueblo se encontraba el Río Arnoia y nos dijo que nada más pasar el puente salía una senda a la derecha que nos llevaría a una caseta de piedra donde había un chorro de aguas termales. La verdad que no nos apetecía agua caliente en ese momento, pero fuimos hasta allí a ver que tal. Había un hombre mayor en bolas y esperamos a que terminara para meternos nosotros. Fue todo un acierto ya que el agua no estaba caliente, más bien fria, y el baño fue genial. Solo quedaban unos 20 kms hasta Orense y esta parada nos vino genial para recuperarnos un poco. 

Colegiata de Xunqueira de Ambía


El lugar que nos recomendó el dueño del bar en Xunqueira de Ambía para darnos un baño

Regresando de la ducha

Río Arnoía
   Los últimos kilómetros antes de llegar a Orense fueron de bajada pero con fuerte calor y un tráfico bastante denso. Nada más entrar a la ciudad pinchó mi bicicleta, por supuesto en la rueda trasera que es la más dificil de cambiar al tener que quitarle las alforjas, además los piñones se nos desparramaron de nuevo por el suelo. Arreglamos la bici como pudimos con un calor terrorífico. Aunque estábamos a la sombra, el viento venía muy caliente. Orense está en el fondo de un valle y rodeado de montañas y si os fijais de vez en cuando en las temperaturas, en verano hay veces que hace más calor que en el sur.
Al llegar al centro de la ciudad ya creíamos que nuestro sufrimiento terminaba, pero resulta que Orense tiene unas cuestas bestiales y como la ley de Murphy siempre aparece en estos momentos, el albergue de peregrinos se encontraba en lo alto de la ciudad. Casi sin aliento y con 100 kms recorridos llegamos al albergue, nos duchamos y salimos a cenar. Aún de noche el calor era insoportable, después vimos en el telediario que durante el día habíamos llegado a los 39ºC, que para Galicia no está nada mal.

Dando una vuelta por Orense

sábado, 21 de septiembre de 2013

DIA 13.- PUEBLA DE SANABRIA - LA GUDIÑA. 53 Kms.

A las 08:00 de la mañana salimos de nuestro albergue. A pesar de encontrarnos a principios de septiembre el termómetro marcaba 3ºC. Según nos había dicho Ramiro, el chico del taller de bicis, nos esperaba un puerto duro, el Padornelo, así que no nos venía mal que hiciera algo de fresco. Nos habían recomendado que no fueramos por el camino, que lo hicieramos por la carretera, ya que las obras del AVE interrumpen el camino y hacen muy dificil el rodar en bicicleta.
Mientras hacía una última foto del Castillo, pasaron junto a mi tres ciclistas con remolques en sus bicicletas. Más tarde los alcanzamos y estuvimos de charla con ellos. Santi, Victor y Salva son de Reus y están haciendo la Vía de la Plata desde Cáceres a Santiago. El menor de ellos tenía 60 años y el mayor 67. A nosotros nos da mucha moral ver a gente de estas edades haciendo estas machadas, ojalá estemos tan bien a su edad y no nos quedemos en un parque dando de comer a las palomas.
A llegar a Requejo ellos pararon en un bar a tomar un café y nosotros seguimos hacía el puerto, queríamos pasarlo lo antes posible. La carretera nacional por la que ascendimos está en muy buen estado y casi no lleva tráfico, a causa de que la Autovía A-52 va paralela a ella. El puerto del Padornelo no nos pareció muy duro, tenía una pendiente soportable, incluso cuando llegamos arriba nos quedamos extrañados de que ya se había terminado.
Pasamos el pueblo de Lubían y tuvimos un par de subidas hasta el tunel de la Canda, estas más cortas pero algo más empinadas que el puerto anterior. Al pasar el tunel ya nos encontrábamos en Galicia. Estábamos eufóricos de haber llegado hasta aquí pedalendo desde la puerta de nuestra casa en Murcia y buscamos el cartel de GALICIA, para hacer una foto del momento, pero nuestro gozo en un pozo, parece que los carteles los han reservado para la autovía y en la carretera nacional...ni rastro.
No mucho más que contar sobre esta jornada ciclista, la verdad que no fue memorable, tuvimos que hacer todo el camino por la nacional y aunque no había tráfico, echamos de menos un poco de tierra en nuestras ruedas.
Llegamos muy temprano a La Gudiña, sobre las 11:30 de la mañana y buscamos el Albergue de Peregrinos. Al llegar no había nadie pero estaba la llave puesta en la puerta. Llamamos al número de teléfono de Protección Civil y nos dijeron que cuando pudieran bajarían. Nos duchamos, lavamos la ropa y esperamos hasta las 13:30 y allí no apareció nadie, asi que nos fuimos a comer y a dar una vuelta por el pueblo. A la vuelta echamos la siesta y por fin a las seis de la tarde apareció uno de los encargados del albergue que nos cobró 6 euros por persona y nos selló las credenciales. Cuando ya pensábamos que tendríamos el albergue para nosotros solos, apareció una pareja de italianos que acababan de llegar en tren y comenzarían el camino a pie desde La Gudiña. La verdad que nos nos molestó dormir en compañía, el albergue era muy grande y casi que lo preferíamos.
Por la tarde fuimos a dar una vuelta por el pueblo, para una vez que llegábamos temprano a un lugar, la verdad que tenía poco que ver.

Momento en el que nos cruzamos por primera vez con los chicos de Reus

Hicimos pocas fotos. Este dia nos hubiéramos cambiado por la gente que iba a pie por el camino.

Albergue de La Gudiña

Iglesia de San Martiño (La Gudiña)

La Gudiña


La Gudiña

DIA 12.- SANTA MARTA DE TERA - PUEBLA DE SANABRIA. 63 Kms.

Salimos de Santa Marta de Tera en una mañana fresca, que no fría,  perfecta para montar en bici. El paisaje era idílico, ríos, embalses, mucha vegetación, incluso se nos cruzaron unos corzos por el camino. Estábamos disfrutando de cada pedalada cuando comencé a notar que mi rueda trasera no iba bien. Paramos y descubrimos que la cubierta tenía un "huevo", pero pensamos que duraría hasta Puebla de Sanabria, nuestro destino final de la jornada, de todas formas no lo podíamos solucionar, era domingo y los pueblos por donde pasábamos no tenían nada abierto. En un camino entre Rionegro del Puente y Monbuey la rueda reventó con una tremenda explosión, la cámara estaba destrozada pero lo peor es que la cubierta tenía una raja de unos 7 u 8 centímetros y para eso si que no teníamos recambio. Nos quedamos con cara de tontos y sin poder reaccionar en unos minutos. De repente recordé que había visto por internet una chapuza hecha con cinta americana. Mientras que yo iba cambiando la cubierta sana a la rueda de atrás, Merce enrrolló la cubierta dañada con varías vueltas de cinta americana. Pusimos esa cubierta en la parte delantera para que no sufriera el peso de las alforjas, lo malo es que si reventaba de nuevo había mas probabilidad de caer. Descubrimos que la carretera no iba demasiado lejos del camino donde nos encontrábamos y cruzando por uno campos pudimos incorporarnos a la N-525, cosa que deberíamos haber hecho anteriormente, nada más notar que la rueda no iba bien, pero de estos errores se aprende. 
Aún nos quedaban 32 kms de carretera para llegar a Puebla de Sanabria y fue un tramo muy tenso. Había bastantes kilómetros de bajadas pero con la rueda delantera en esas condiciones tenía que ir frenando para no pegarme el gran hostión si reventaba de nuevo.
Al fin llegamos a Puebla de Sanabria, y nuestra chapuza aguantó perfectamente, incluso creo que hubiera aguantado bastantes kilómetros más. Cuando surgen estos problemas y los puedes solucionar por tus propios medios sientes una gran satisfacción.
Era domingo y pensábamos que tendríamos que esperar hasta el lunes para comprar una cubierta nueva, pero en el albergue donde nos quedamos, nos informaron que había un chico en el pueblo que reparaba bicicletas y que lo podíamos llamar. Ramiro fue nuestro angel de la guarda ese día, lo llamamos y se ofreció a pasar a recogernos por la tarde en nuestro albergue y llevarnos a su taller. En un momento nos puso una nueva cubierta y nos bajó en su coche de nuevo al albergue. Muchas gracias Ramiro por tu gran ayuda. 
Por la tarde, ya con la bici reparada y mucho más tranquilos, dimos una vuelta por Puebla de Sanabria, sin duda el pueblo más bonito que visitamos durante el viaje.
Esa noche nos quedamos a dormir en el Albergue Casa Luz, el cual recomendamos a cualquiera que se acerque a Puebla de Sanabria. 10 euros por persona con wifi y llamadas a fijos nacionales gratis. La atención buenísima y todo muy limpio. 

Mojón indicando el camino

Alcanzando a los italianos, nuestros compañeros de albergue de la pasada noche


Rio Tera

Pedaleando por parajes idílicos. No nos esperábamos que nuestra plácida jornada se iba a estropear


Una acequia invade el camino



Embalse de Nuestra Señora de Agavanzal

No es necesaria una bici de 1.500 euros para cruzar España, con esta bien sencilla también se puede hacer.



Presa del Embalse de Nuestra Señora de Agavanzal

La chapuza aguantó hasta Puebla de Sanabria

Puebla de Sanabria, uno de los pueblos más bonitos de España.

Castillo de los Condes de Benavente. Puebla de Sanabria

Castillo de los Condes de Benavente. Puebla de Sanabria


Ermita de San Cayetano

Iglesia de Ntra. Señora de Azogue y Ermita de San Cayetano

Casco antiguo

Casco antiguo